19 de diciembre de 2010

Así soy...

19 de diciembre de 2010
Bueno, resulta que me confundí de entradas. Se supone que ésta iba a ser la de las confesiones, pero éste fin de semana he estado como en medio de una crisis que me ha trastocado el cerebro. Realmente éstas no son mis confesiones, las confesiones se las pongo después. Como éste es un blog personal donde uno puede escribir sobre lo que se le dé la gana, hoy me antojé de que usted se diera cuenta de cómo puedo llegar a ser yo. Sin más preámbulos, 35  36cosas que debe saber de mí:
  1. A veces soy como un man, no puedo hacer dos cosas al tiempo, pero a veces soy muy buena vieja: dramática
  2. Me preocupa la estética sólo cuando ya entro en decadencia...es decir, se me olvida depilarme las cejas, pintarme las uñas y no me peino 
  3. Lloro todo el tiempo y por cualquier cosa
  4. Estoy estudiando francés con una alta probabilidad de fracaso
  5. Estoy montando un proyecto de negocio: Expedición Sur
  6. Se me olvida la mayoría de las cosas
  7. No puedo dormir con medias y no puedo dormir si no tengo una almohada a lado y lado
  8. Soy extremadamente torpe. mínimo tres golpes en el día y dos morados a la semana
  9. Me quejo con mucha frecuencia, a veces hasta ser insoportable
  10. Cuando tengo sueño y no puedo dormir, me empieza a picar el cuerpo...especialmente las piernas
  11. Soy mala para los nombres, pero buena para las combinaciones entre números y letras, por ejemplo las placas de los carros. 
  12. Todavía siento que no sé qué hacer con mi vida
  13. Quedé atrapada en el pasado, nunca existirá algo mejor que  Carrusel, Baila Conmigo, El Tesoro del Saber o Alcanzar una Estrella
  14. Somatizo toda cuanta cosa me pasa; los síntomas pueden ir desde enrojecimiento de la piel hasta cálculos renales y sinusitis crónica. El más frecuente: nauseas
  15. Estoy convencida de que los hombres no sienten
  16. Me encantaría aprender a tocar guitarra, pero soy muy poco constante
  17. Me arrepiento de muchas cosas que hice, así haya aprendido mucho
  18. Quiero irme a vivir con los indígenas del Amazonas por ahí seis meses
  19. Cuando no tengo nada que hacer, me deprimo. Cuando tengo mucho que hacer, me estreso
  20. Soy muy cobarde hablando personalmente con la gente, prefiero escribir
  21. Soy demasiado soberbia. Me creo muy importante y muy inteligente. Creo que de alguna manera voy a cambiar el mundo, que soy la persona perfecta para que los científicos hagan estudios. He creado un mundo en el que para mí todo es perfecto, todo funciona a las mil maravillas porque sencillamente está regido por mí y lo que pienso
  22. Soy demasiado tonta. El solo pensar lo que acabo de mencionar me hace dar cuenta de mi grandísima estupidez. No creo que esté tan mal tener un ego tan inflado, pero para creer que entre más de 6 billones de personas yo pueda ser la que de nuevas luces al mundo, pfff muy tonto.
  23. Me gusta mi carrera, pero creo que debí haber estudiado otra cosa. Mi forma de ser no cuadra tanto en una carrera como economía...debí haber estudiado sociología o algo así.
  24. Me aterra la manera en la que a veces siento
  25. Mi "querer ser" es un insulso pajazo mental, que en el fondo quiero ser como el resto de gente, quiero tener mucha plata para hacer lo que se me de la gana.
  26. Soy demasiado afanosa. Quiero todo ya, que todo pase ya. Eso que repito de "todo tiene su tiempo y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora" es otro pajazo mental que me meto todo el tiempo. 
  27. Puedo cambiar de parecer en cuestión de segundos.
  28. No soy capaz de estimar medidas. El que me pregunten ¿Cuánta gente había? es un absurdo para mi.
  29. Puedo tardarme horas en el baño
  30. Tengo un insoportable dolor de cabeza permanentemente
  31. Entro en crisis por ahi cada semana
  32. Soy incapaz de levantarme temprano. 
  33. Siempre llego tarde
  34. No puedo quedarme con las cosas, debo hablarlas (o por lo menos escribirlas), sino exploto
  35. Con todo el pelo que se me cae, se puede hacer una peluca
  36. Soy incapaz de sacar la crema dental desde la mitad del tubo

16 de diciembre de 2010

Mi mágico 2010

16 de diciembre de 2010

Mucha gente hace un ejercicio interesante al final y comienzo de año. Se trazan metas para cumplir, programan viajes y planean actividades. Luego de varios intentos, y como muchas otras cosas en mi vida, eso está declarado imposible. Y no es solamente porque no quiera agendar mi vida, no es solamente porque me parece aburrido tener metas y hacer que la vida de uno gire en torno a algo que se propuso, sino que también es cuestión que sé no puedo, mi mente se siente atada y huye despavorida.

Por ejemplo, para estudiar para los exámenes de la maestría hice un cronograma divino, con los 5 componentes del examen, discriminado en temas y subtemas, con fechas exactas y demás. Estaba programado para dos meses, pero solo vine a estudiar 15 días antes de los exámenes y sin siquiera mirarlo. No sé si es que no soy lo suficientemente seria con mis cosas personales o que realmente esa es la manera como funciona mi vida ahora.

En mi trabajo las cosas son diferentes, tengo lista de to do’s diarios, semanales y a largo plazo. Está discriminado por tareas permanentes y transitorias, el calendario está repleto de cosas por hacer. Aunque la información está dispersa y a veces ni la encuentro, me siento conforme cuando al terminar del día el post-it con los diarios, está todo tachado.

Pero ante todo quiero decir que soy feliz así, no me molesta estar en ese tipo de dicotomía, me encanta que las cosas en mi vida resulten porque sí, aunque sé que indirectamente busco las cosas, no es simplemente algo que me proponga. El año pasado fue un año de cambios, éste año fue un año de sorpresas. Me encantan las sorpresas que no me espero (sí, existe tal cosa como sorpresas esperadas, por ejemplo cuando te dicen: oye, te tengo una sorpresa. Sabes que hay algo, pero sigues sin saber qué es).

2010 comenzó sin muchas expectativas, la verdad un poco desanimada porque me dio muy duro empezar mi primer año sola, pero igual había terminado el proceso de adaptarme a las cosas nuevas. Me di la oportunidad de conocerme y me encanta cómo soy.

Uno cambia, uno no va a ser el mismo por el resto de la vida, y qué mamera que eso fuera así. Antes yo era complicada, peleona, jarta, minuciosa en detalles; se me dificultaba mucho adaptarme a los cambios, era una aberración salir de paseo sin maleta y sin destino claro. Creo que el haber llegado a Bogotá, lejos de todas esas cosas que estuvieron siempre en mi vida haciendo marcación a presión, hasta ahora, ha sido la mejor y más sana decisión que he tomado. Como le dije, me di la oportunidad de ser yo, de realmente rebeldizarme con todas esas instituciones que me jodieron la cabeza y darme lugar a las cosas que me salían del corazón, tanto así que éste ha sido mi mejor año.

De los aspectos importantes, solo falta incrementar lo de la plata y procurar cuidar más mi salud. El resto, está perfecto. Me siento tranquila, recuperé la sensación de estar en el lugar que es, empecé a actuar inteligentemente y a adaptarme a mis decisiones, dejé atrás un pasado que me atormentaba y con eso se abrió un futuro que me encanta.

Me enamoré sin darme cuenta y oportunidades en el trabajo se fueron presentando; estudié muchas cosas y logré conseguir una maestría sin pagar un peso (jeje sí, pasé). Me siento libre y nada se compara con eso, descubrí lo maravilloso que puede ser dejar que la mente se escape del cerebro y se vaya a lugares raros.

Los 15 días que quedan, seguramente serán espectaculares. En 8 días me voy para mi casa, con mi familia, con mis amigos, a celebrar y con la idea de que el año que viene, será mejor que éste.

30 de noviembre de 2010

Noticias y próximas publicaciones

30 de noviembre de 2010

Yo sé que a usted no le importa lo que le prometí, que seguramente ni se acuerda que le dije que iba a publicar sobre el artículo de Maria José Martínez en SoHo, pero me puse en el trabajo de revisarlo y cumplir mi promesa, pero no pude. Iba a publicar ese post, pero le juro que estaba muy malo. Las conclusiones son: SoHo apesta y apesta mucho, yo no soy nadie para criticarle los polvos a la gente y Maria José Martínez es muy bonita pero le ha ido muy mal.

Por otro lado, le adelanto que pasé los exámenes a la maestría! Hoy revisando los puntajes me hormigueaban las manos del susto. Me fue bien y estoy feliz :) Infortunadamente todavía no sé si pasé o no en la maestría; falta enviar el pre proyecto de grado (que estoy absolutamente jodida) y la entrevista, que ahí descabezan a unos cuantos, espero no ser yo.

En éste momento me siento cansada, con sueño, de mal genio y tengo muchísimas cosas que hacer, entre ellas el proyecto de turismo, pre proyecto de tesis, curso de inglés, curso de cooperación, trabajo del trabajo, arreglos navideños en la oficina y todo es para ésta semana. Me tomo el tiempo de escribir porque a pesar de fijar los ojos, es un espacio donde me relajo y distraigo.

Comenzó diciembre y por lo general uno en estas épocas uno reflexiona sobre el año que pasó. Si usted me ha parado bolas, sabe que yo vivo en continua crisis y que esas "reflexiones" son más que recurrentes en mi, pero el punto es que el próximo mes va a estar completamente dedicado a mi, a lo que aprendí éste año, lo que me gusta, lo que no, etc. Luego no vaya a decir que qué mamera leerme, que todo el tiempo hablo de mi, que bla bla bla, porque le estoy advirtiendo. Si no quiere, pues no pase.

De antemano le pido disculpas porque esto puede estar ilógico; perdóneme si le hice perder el tiempo leyendo esto tan de baja calaña, pero ni siquiera estoy pensando. Quién sabe qué neurona es la que está procesando...seguro una de las afectadas por el fin de semana jeje.

26 de noviembre de 2010

¿Quién se cree?

26 de noviembre de 2010

He tenido ganas de escribir algo, algo sobre el mundo, sobre lo que pienso de la demás gente, ya no más sobre mí y mis estupideces. Veo actitudes, escucho voces incongruentes, veo a la gente dando tumbos. Critican, hablan, odian, aman, se creen tan importantes como para que a la otra gente le importe lo que piensan. Me da asco ver que su rebeldía es una rebeldía sin causa…o bueno, tienen causas, pero son ajenas. Les parece que está bien usar las palabras de otros para justificar su inconformismo. Todos son iguales, tratan de alejarse de sus miserables vidas amparados en defender sus derechos de libre expresión vociferando palabras soeces y diciendo: “jódanse, me importa un culo lo que digan de mi, critiquen lo que quieran que tienen su vida retorcida”. Ellos mismos están cayendo en lo que tanto critican; están hablando de los otros, de lo que piensan, de lo que creen; juzgan bajo su ojo estúpido y pequeño y se hacen los tontos con la incongruencia entre su cabeza y su lengua.

Se creen libres porque no les da pena de hablar de cómo les dan de rico por el culo, o porque se sienten capaces de decir que se fuman un porro o porque no les importa emborracharse, fumar, pelear, insultar, o porque no les tiembla la voz cuando se refieren con ofensas a Dios.

Se creen con la última verdad, creen – como yo- estar claros en todo, discernir entre lo bueno y lo malo, diferenciar entre lo cierto y lo falso. Se creen genuinos o auténticos por ir en “contra” de lo que “todo el mundo” piensa, dice o hace. Critican a los que tenemos un trabajo y estamos inmersos en un sistema, critican a los que creemos en un Dios, a los que escuchamos música comercial y leemos libros comerciales.

Y sí, me molesta la incongruencia, me choca que me exijan cordialidad y respeto cuando no son capaces de darme lo mismo. Me molesta que se crean indispensables y tan importantes como para no mirarme a los ojos cuando hablo. Me molesta en sobre manera que ataquen cuando les hace caer en cuenta de sus errores y que su prepotencia esté por encima de su sensatez.

Pero quién soy yo para hablar de otra gente, acaso me creo tan importante como para que les importe lo que yo pienso? Acaso esa soberbia que dicen que nada en todo mi ser está llegando de verdad a mis ojos y mi cabeza y no me deja ver otras cosas?

24 de noviembre de 2010

"Resuelve para i"

24 de noviembre de 2010

Confieso que “el amor” se ha cagado en mí, como antes yo me cagaba en él.

Yo creí estar enamorada dos veces en mi vida. La primera vez, fue con mi segundo novio. Yo tenía 16 y aunque nunca pensé en un futuro con el tipo, él me hizo saber qué podía llegar a ser el amor. Él es el hermano de una niña que solía ser mi mejor amiga (hablé de ella en el primer post de la amistad, por si no se acuerda, pinche aquí), tiene 5 años más que yo, y en ese tiempo era igualito a Smeagol. Nos cuadramos el día de mi cumpleaños número 16 escribiendo cosas en un papel…creo que todavía lo tengo. El tipo me conquistó con detalles: flores, cartas, palabras muy lindas. Duramos como año y medio pero no logramos sobrevivir mi entrada a la universidad. Mi mamá siempre me ha cuidado mucho y en la época de colegio, era poco lo que salía y claro, el entrar a la U uno tiene una libertad absurda que para niñas tontas como yo, es imposible de manejar. Al principio me dio durísimo, duré como tres meses con resaca, pero luego el tiempo hizo lo que tenía que hacer.

La segunda vez que creí estar enamorada, fue con mi tercer novio. Sí, justo después del que les acabo de mencionar. A diferencia del anterior, éste no tuvo que conquistarme, yo caí rendida desde que comenzamos a hablar. Es un tipo alto, inteligente, versado, recorrido, aunque menor que yo; alguna vez una vieja amiga de un amigo, dijo que él era como un "ken" pfff. Infortunadamente las cosas no terminaron igual de rápido que como empezaron, teóricamente terminamos hace como 7 años, prácticamente hace como 1. Con esto me refiero a que a pesar de que yo tuviera novio o él tuviera novia, siempre había algo. No podíamos desprendernos y cuando él iba a Palmira o yo venía a Bogotá, salíamos. Yo la embarré con él y supo aprovecharse muy bien de eso…por la culpa que yo sentía, creía que él podía hacer conmigo lo que quisiera y siempre terminaba aguantándomele cosas horribles, hasta que hace un año cortamos del todo.

Después de estas dos y otras experiencias que realmente me hicieron comer mierda, me volví prevenida, desconfiada, apenas alguien se interesaba en serio en mí yo salía corriendo, evitaba cualquier relación seria (así fue como en un año tuve como 4 novios) y creía que si evitaba enamorarme, pues no iba a llorar más. MENTIRA! Me topé con el más hdp de todos los hombres, del cual creí estar enamorada, pero viéndolo en retrospectiva, sólo estaba encoñadísima. Sin enamorarme, sin tener una relación o por lo menos un vínculo sentimental, éste man si que me hizo sufrir. “Duramos” como dos años, y lo pongo entre comillas porque como él mismo me lo dijo, entre nosotros nunca hubo nada. Nos veíamos esporádicamente, cuando las fiestas o las salidas a beber al parque así lo permitían. Él tenía otras viejas y no ahorraba esfuerzos en que yo me diera cuenta y yo como una vil pelota sólo estaba con él. Las cosas terminaron cuando ya tocaron fondo…un miércoles cuando por fin pude decirle todo. El tipo me dijo que yo era muy buena para él, y tenía toda la razón…y no es que yo fuera muy buena, es que el man es una porquería. Con él aprendí a darme a mi lugar, aprendí a respetarme y a valorarme, aprendí qué quería y qué no quería de un man; y creo que fue gracias a él que puedo decir en éste momento: estoy enamorada.

Cochi fue la primera persona que conocí cuando llegué a Bogotá y desde que lo vi, me gustó. Salimos algunas veces, pero nada serio, igual yo estaba cambiando un montón de cosas y lo que menos quería era que alguien me desestabilizara un aspecto en el que estaba tranquila. Pero pues nos empezamos a conocer y él se dio cuenta de lo grandiosa que soy (jaja). El 24 de febrero de éste año, decidimos dar un paso más y cuadrarnos. Desde entonces hemos tenido una pelea y todos los fines de semana son más bacanos que el anterior.

Las cosas van normal, sin apresurarnos y sin presiones de ningún tipo; tenemos todo el tiempo para ser. Mi novio es un tipo serio, juicioso, buen niño…muy diferente a las lacras con la que estaba acostumbrada a salir. Es medio loco y muy muy ñoño, cosa que se refleja en su particular manera de decirme que me quiere.

Ésta es una ecuación que se la dejo apreciado lector, para que la haga y se dé cuenta cuánto me quiere mi novio: "Resuelve para i: 9x - 7i > 3(3x-7u)”

Te Amo baboso, felices 9 meses

15 de noviembre de 2010

Del autosabotaje y otras decadencias

15 de noviembre de 2010
A veces no le ha pasado apreciado lector, que quiere algo tanto tanto que le da miedo no tenerlo o perderlo en el intento de tenerlo y piensa en autosabotearse? Algo así me pasa a mi. Le tengo miedo al fracaso, le tengo miedo al juzgamiento, le tengo miedo a no poder alcanzar. Yo no sé si le conté, pero intento entrar a una maestría que ojalá fuera como las demás. A ésta maestría se puede entrar sólo pasando 6 exámenes, una entrevista y que estén conforme con su pre proyecto de grado (es una maestría muy buena y muy barata, por eso tanto filtro).

Exáctamente lo que le acabo de decir, me pasa con los exámenes de la bendita maestría. Sí, ya son ésta semana y aunque ya caí en cuenta de la estúpidez que estaba por cometer y encaucé mis andares, le voy a contar qué fue lo que me pasó.

Un día, hace como dos semanas, entré de nuevo en crisis y lo que mejor me pareció pensar en ese momento fue: "bueno, si no estudio, pues no paso y así tendré una excusa para no sentirme tan triste...porque si estudio y paso, la única justificación es que vos sos bruta y no sos capaz de hacerlo". Entonces lo más lógico en ese momento fue echarme a las petacas y si no pasaba, pues era obvio, no estudié y si pasaba, sencillo, era una genio.

En éste momento sigo pensando que es una grandiosa idea (en serio), pero otra parte de mi, al parecer más fuerte y temeraria que la anterior, le hizo caso al regaño del baboso, y me obligó a estudiar. En éste momento estoy repasando lo que creo que es básico de Ciencia Política y pronto me dispondré a repasar un poco de Francés, que sé igual que me lo voy a tirar porque no tengo ni pito de idea de francés, pero bueno, escuchar a Manu Chao y Francis Cabrel depronto me ayudan.

Sigo creyendo que no estoy preparada para que mi cédula aparezca en la lista de los petardos que no pasaron, pero supongo que si eso llegase a pasar, me echo a llorar por ahi dos días y empezaré a pensar que por ahora no me conviene (maldita sea! cómo no me va a convenir hacer una maestría!!!) y seguiré estudiando para pasar los próximos exámenes o trataré de quebrarme el c***o para conseguir plata y pagarme una más cara.

Le prometo que si paso le cuento, y si no, pues me desapareceré un mes hasta que sea capaz de darle la cara y reconocer que hubiera sido mejor idea seguir autosaboteándome.

Manténgame en sus buenos pensamientos, mándeme buena energía, ore - rece por mí que yo trataré de conservar la calma y recurriré a mi capacidad de análisis y buen criterio para dar lo que tengo en pro de pasar la bendita maestría.

Un abrazo

UPDATE 22/11/10: Todavía falta una semana para los resultados. Quisiera pensar que no hay duda alguna que voy a pasar, y realmente a veces esa idea se concentra en mi cabeza, pero no puedo mantenerla. Tal vez 104 personas más están pensando lo mismo...y las compadezco. Presenté los exámenes, estudié, me dolió la espalda y el cuello...fue una prueba más de resistencia que de conocimiento, y confieso que se siente bien haber hecho lo correcto: esforzarse y dar lo mejor de sí. Si resulta, regio...todo será peor; tendré que levantarme a las 5 de la madrugada, gastar plata en taxi y fotocopias, salir y correr para el trabajo, trasnochar haciendo tareas e invertir tiempo de mi fin de semana en ensayos y presentaciones. Si no sale, supongo que algo mejor vendrá después. No sé cuál es la probabilidad de pasar o de quedarse...y la verdad, no me importa, tengo susto y no quiero saber cuantos politólogos o profesionales en relaciones internacionales compitieron conmigo (mi descanso está en pensar que hubo muchos ingenieros :P). Sé que no es gran cosa si paso y tampoco si no...el mundo no se me va a acabar, pero qué fresquito daría.

8 de noviembre de 2010

Parezco sicóloga, qué mamera...

8 de noviembre de 2010


En serio estoy por creer que algo anda mal con mi cabeza. No sé si sea normal, pero todo el tiempo estoy cuestionándome, todo el tiempo estoy reevaluándome, todo el tiempo estoy sintiéndome en el lugar que no es. Todo el tiempo estoy pensando sobre mí, por qué hago lo que hago, por qué la otra gente hace lo que hace…

Ésta vez, la crisis se desató por una vaina que ni siquiera creo. Estuve en una capacitación de "Habilidades Gerenciales", y como ya los “coaches” no saben qué más inventarse, pues todos hablan de PNL. De entrada “programación” es una palabra que me cae gorda, yo no soy un computador para que me programen. Neuro – lingüística, me parece fabuloso poder alinear lo que uno piensa con lo que dice y hace, pero en mi caso, dudo muchísimo que eso se logre a través de cursos y maricadas de esas. Confieso que me encanta todo lo que me pueda revelar algo más de mi, aprender a descubrirme, aprender a convivir conmigo y conocerme…eso se me ha hecho completamente imposible, yo no sé ni siquiera quién soy y para qué putas estoy aquí. Esto fue lo que desató la crisis. La PNL se basa en conocerse para uno cambiar lo que no funciona y dirigir su vida hacia un objetivo trazado. Esto suena bonito…pero yo no lo creo. Primeramente porque no considero que los cambios se hacen así porque sí; para mí un cambio nace de una experiencia vital que recae directamente sobre el ser, el resto serán puros pajazos mentales. Segundo, a mí, no me ha funcionado tener un plan. Admiro realmente a quienes llevan su vida organizada, que se rigen por lo que alguna vez se trazaron y todo lo hacen por ello. Yo declaro eso en mi vida, un imposible.

Yo sé que estoy muy chiquita, y que todavía me falta mucho pelo pa’ moña, pero de lo que he vivido hasta ahora, es de lo que puedo hablar, y eso es lo que trato de hacer: mi vida ha estado llena de giros, de cosas malas, de cosas buenas, de ires, de venires, de estar aquí, allá, de pensar esto y lo otro, de cambiar. Hace no más dos años lloraba porque me cambiaron de oficina (sí, lo más banal, nada más que un cambio de espacio físico, sólo eso….perdón, solo eso), pero eso tal vez se debía a que me estaba descubriendo y eso asusta (ya ve por qué le digo que parezco psicóloga, fó!). Viéndolo todo desde acá y viéndolo en macro, toda mi vida he querido cosas distintas y las he probado.

Yo simplemente no puedo pensar que todo lo que vengo a hacer en el mundo, lo tengo escrito en un papel. Yo tengo las cosas grandes, las etéreas, las que no puedo encasillar en un “cómo” o en un “así”. Yo quiero transformar realidades, yo quiero cambiar el mundo, yo quiero ayudar, yo sé a través de qué (mi cabeza y mis manos), pero aún no puedo saber cómo. Es cierto, la cabeza funciona por objetivos, pero los míos son a corto plazo, no son tan ambiciosos, y sé y confío que todos esos objetivos se unen en algo muy grande, pero me queda imposible ahora, decir qué es eso tan grande. Yo creo que la misión de uno en la vida no se puede determinar ahorita. Los puntos no se unen en perspectiva, lo hacen en retrospectiva.

Me pusieron a “visualizar” el futuro, me pusieron a pensar quién iba a ser la Luisa de 10 años más adelante, de 50 años más adelante. Y no pude verla claramente. En 5 años pude ver a una vieja en medio de la selva despidiéndose de toda una comunidad indígena. Luego, vi una familia, luego vi una viejita en una casa de campo contándole historias a sus nietos, sobre sus viajes a la selva y el por qué de su tatuaje.

Apuntar todo y enfocar las fuerzas para lograrlo, le quita el tinte a la vida. Me decían que era un solo camino: adelante el futuro, atrás el pasado; “NOOOOOO” fue lo que pensé. En primer lugar mi pasado no está atrás…está a mi lado, si quiero echar mano de él y coger todo lo que aprendí, el que esté atrás es una pérdida de tiempo…tendría que girar (darle la espalda al futuro por si no me hice entender), buscar lo que quería y quién sabe qué tantas cosas me perdí por estar mirando atrás (asi sea pa encontrar algo que sirva de herramienta pal futuro), mi futuro claramente está delante, pero no es lineal.

“Encontrar mi lugar en el mundo”, el lema de la jornada…cuando lo encuentre, le digo. Lo sentiré, se lo aseguro. Mis entrañas se encargarán de eso. Sólo que eso no lo puedo hacer sentada en una silla escuchando a un par de manes que vienen a enseñarme de mi vida. Perdón, pero no lo acepto.

Mi lugar en el Ministerio: pues…yo la verdad estoy usando mi trabajo para coger todo eso que necesito: conocimientos, experiencia, capital social, plata…para poder cambiar una parte del mundo, partecita…chiquitita, pero cambiarla.


Si de soñar se trata, yo sueño: quiero aprender todo lo que sea necesario de formulación y gestión de proyectos, quiero irme de pueblo en pueblo armándolos y moviéndolos; saber muchísimo de eso y para cuando esté "grande", que siente cabeza, crearme una empresa de consultoría; tener una casita en las afueras de la ciudad, donde se pueda respirar aire limpio; poder tener la posibilidad de viajar; quisiera no sentirme atada a las cosas, a las ciudades; quisiera no necesitar más...saber que mis entrañas se sienten libres. Esto es lo que yo sueño, no sé si se hará realidad, no sé si será así que cambie realidades...ni siquiera sé si mañana voy a estar viva.

Yo no pienso que uno viene armado, fijo fijo si viene con un propósito. Y hay es que descubrirlo, no inventarlo! si yo creo que vengo con un propósito, lo busco…y veo opciones, tomo caminos, intento, voy, vengo, caigo, me levanto. Si me invento un propósito, me pierdo de lo que me trae la vida. Yo pienso que uno va armando su rompecabezas…sí, la vida es como un rompecabezas…empiezas armando el marco, y con tiempo y viendo que las figuras cuadran, vas armando el resto, sólo para cuando pase el tiempo, darte cuenta lo lindo que te quedó y lo orgulloso que te sientes. (Aclaración: 1500 pieces puzzle).

2 de noviembre de 2010

Reburujeando en el baúl de los recuerdos

2 de noviembre de 2010
Tratando de encontrar un dato que me llegó en un correo, me puse a buscar entre los elementos enviados (sabía que se lo había remitido a alguien más) a ver si me lo encontraba. Resulta que me encontré más que eso y la verdad me ha dado un vuelco el estómago.

El correo es como ese archivo silencioso que te guarda los secretos, obviamente si no has sido precavido y lo has borrado todo. Encontré unos tesoros del alma que me gustaría extraer:

Conversación con un hombre muy especial al que admiro. Yo le decía:

Quedé con la sensación de no haberlo dicho todo...tal vez porque en ese momento no estaba tan lúcida o clara como para poder expresar todo lo que pensaba (sueño, cansancio, marcación a presión del sujeto al lado...esas cosas pasan, vos entendés). La verdad odio tener que callarme cosas; siempre pienso "qué hubiera pasado si en vez de cerrar el pico, lo hubiera abierto" y siendo sincera, a pesar de lo que pueda pasar, prefiero mil veces la certeza de un desatino que la duda de un acierto; no me gusta quedarme con ese bittersweet de no haber arriesgado lo suficiente, de no haber dicho lo suficiente...y esa es la razón de la presente comunicación. Creo que nunca es tarde para uno decir lo que piensa y siente, y aunque hubiera sido más apropiado a la media noche del jueves, creo que la mañana del lunes, no está tan mal...

Ese día la conversación se tornó bastante trascendental, llegamos hasta Tenerife! Yo la verdad no quería llegar hasta allá, mis pretensiones son por ahora muy básicas. No te voy a decir que quiero pasar el resto de la vida con vos; ni que (como si te dije ese día) quiero un anillo en el dedo - de hecho el solo pensar en eso me da como escalofrío, le temo mucho y muy bien lo sabés; - ni que estoy enamorada de vos ni nada por el estilo...sólo te puedo decir que me encanta tu forma de ser (asi terco, trabajólico, ácido y todo), que disfruto muchísimo el tiempo a tu lado (y también de los picos y los abrazos), que he aprendido más de lo que imaginé, y que por ahora no me interesa dejar de sentir.

(…) así como quedamos la última vez, me comprometo a dar lo que pueda dar. Entre estas cosas he listado algunas, la más importante es que prometo tratar de sacar a relucir mi "facultad de decidir y ordenar mi propia conducta" - la RAE dice que eso es voluntad, aunque para mi es más bien como una lucha de poderes entre la razón y el corazón, donde a veces gana la una y a veces gana el otro - (nótese el resalto en tratar , no mentiras...)...jeje aqui van las siguientes:

Hagamos un trato

Que el entregarte todo lo que pueda dar, sea mi promesa:

- Un aire más puro,
- Un beso suavecito,
- Un hombro y un diván para desahogar el alma, pero un vino para ahogar las penas,
- Un abrazo constante,
- Un pequeño desastre de vez en cuando para sacarte una sonrisa,
- Una oportunidad diaria para conocerme y conocerte,
- Un "estoy pensando en ti" todos los días...así no sea capaz de decírtelo (ya lo sabes)
- Un día más tranquilo (y una noche más intensa...pero creo que mejor omitimos la segunda parte)
y para mí, la más importante: Mi negación a no sentir...porque dejar de sentir, es empezar a morir.

Ya por otro lado, quería contarte que yo también he arriesgado y he perdido, he perdido muchísimo, a pesar de los poquitos años que tengo, me ha tocado agachar cabeza y comer m***a pero tengo claro que para algún día ganar, tengo que arriesgar algo. Comprendo tu temor, pero de eso se trata la vida, de sentir, y no solo sentir amor, alegría, esperanza...también hay que sentir dolor y tristeza, hay que enfrentar situaciones malucas...ahí es donde nos conocemos y donde sentimos al extremo la vida, porque Dios no nos dio corazón sólo para amar y vivir en una constante alegría...todos los sentimientos hay que experimentarlos!!! (Eso pienso yo, si no estás de acuerdo, pos ni modo).

Ya está muy tarde, tengo sueño, mañana tengo pico y placa y hay que madrugar mucho. Te dejo un beso y una flor, un te quiero, una caricia y un adiós. Que Dios te Bendiga, que ores mucho por las pecadoras y que tomes este tiempo para seguir poniendo la casa en orden! Descansa!

Esto pasó en octubre hace dos años. Él me respondió:

Finalmente, ahí va!

Bueno, pues antes que interrumpirme me has sorprendido. Lo dije por reflejo y lo repito con conciencia: hay que ser muy berraco para decir (aún más, escribir) lo que has dicho. El que lo hayas hecho en este espacio, que a mí me da distancia y silencio, es sencillamente oportuno. Valoro pues que asumas el riesgo en aras de certeza (como la certeza es fuente de verdad no me resulta para nada un desatino) y que anheles ambiciosamente ‘decirlo todo’ –tarea que yo, después de intentos fallidos, declaro un imposible-.

Pensé (e intenté) mil (bueno, 4 o 5) cosas antes de escribir y me imaginé un volumen del tamaño de un nuevo Evangelio (bueno, de 3 o 4 páginas), pero tu mensaje es claro y directo, así es mi respuesta.

1. Gracias. Que generosa y valiosa oferta. Una persona que asume sentir lo que siente vale oro.

2. Acepto la parte que implica solidaridad y paz. Solidaridad porque me gusta emprender grandes cosas y necesito compañía. Paz para encarar esas grandes cosas, ojalá por partes, y evitar grandes frustraciones.

3. El dilema de la voluntad lo entiendo distinto. Si el propósito de las cosas está claro, la voluntad es más dócil. Considerando que tenemos una restricción y podemos aprender uno del otro (cuánto me has ayudado a des-aturdir) y ayudar uno al otro, pues vamos a la fija, a lo seguro y a lo inambiguo. Elijo cualquier cosa que signifique SER (con todo lo que implica) o NO SER (también, con todo lo que implica) pero definitivamente me da mamera ‘jalarle’ a ambigüedades.

Vos sos un bello tesoro, no te conformés con menos de un aguerrido conquistador (y buen papá de tus hijos). Tenés, además de mi gusto y admiración, mi compañía, mi solidaridad y mi enorme cariño.

PD1. Como escribiste entre Cervantes y Chespirito (me encanta tu estilo tipo “super-O”), te contesto entre San Ignacio y el Chómpiras. Ya ves, estoy estrenando estilo
Ahora le confieso apreciado lector, que me equivoqué con este hombre. No por él, sigue siendo un ser maravilloso al que no me canso de admirar. Mi equivocación va más por mi lado. Pensé que las “restricciones” a las que nos referimos, se podían sencillamente ignorar y empezar a tener una relación. Y no, las cosas no son tan sencillas. No es algo tan difícil como alinear astros y constelaciones para tener una buena relación con alguien. Pero tampoco es tan fácil como soplar y hacer botellas. Las situaciones son distintas, los tiempos son diferentes, hay que aprender a abrir el ojo para detectar si la persona que nos interesa, está alineada en un momento parecido al de nosotros. No podemos exigir más de lo que podemos dar y cada momento de vida tiene sus propios requerimientos. Tal vez a éste personaje le interesaba un poco más de que yo dejara de fumar a su lado o que le ofreciera un trago después de una jornada dura de trabajo.

Sus palabras siempre serán sabias.

21 de octubre de 2010

Mejor...que me escupa una gallina

21 de octubre de 2010
Como le dije un post atrás iba a estar ocupada...estaba estudiando para unos exámenes, trabajando un poco juiciosa y en fin, haciendo todas esas cosas que a uno de grande le tocan.

En medio de toda esta mierda de cosas (sí, estoy histérica, y qué), nada más reconfortante que las buenas noticias y más cuando esas buenas noticias se refieren a algo que has querido siempre y nunca has podido tener. Sí señor, yo soy de esas que se conforma con ver las vainas chéveres por el televisor porque he corrido con la mala fortuna que me crean vándala y que me les voy a ir a quedar por allá en sus países de la mierda en vez de quedarme aqui trabajando por y en MI país...el punto es que todas esas cosas lindas como presentaciones de teatro, conciertos (tipo U2) y ñolas de esas las veo por cajita porque no he tenido la oportunidad de verlas en vivo y en directo.

Un caso como ese, es el del Circo del Sol...es un espectáculo que me parece del putas y desde que supe que se iba a presentar en Bogotá (algo que se le añade a la nevera), pues estuve pendiente de las boletas. Como yo soy así, de malas por naturaleza, nunca encontré...o tumboleta.com no me dejaba realizar el pago, o se habían acabado...ya me había resignado a que tardaría muchos años en ver el Circo...pero como le dije no hay nada mejor que una buena noticia.

Mi baboso desde hace unos días me estaba diciendo que me tenía una sorpresa, no les voy a contar cual fue el tortuoso proceso de las pistas (odio las sorpresas, o más bien, como que me desesperan), pero el caso fue que llegó hoy con dos boletas para el Circo del Sol!!! Oh Dios Mio!!! Tenía en mis manos dos boletas para VIP (maricaaaaa, VIP!!! ahí pegadito!!!) y adicional a eso el acceso a Tapis Rouge (si usté no sabe francé se jodió)...no habían palabras para describir mi felicidad; grité, salté, le dí un gran beso y un abrazo al baboso, se me iluminaron los ojitos y por cinco segundos fui la mujer más feliz del mundo...

Pero soy yo, como le digo, es mi naturaleza...algún karma estoy pagando. El día de la presentación es el viernes 19 de noviembre a las 4:00 PM...usted dirá, nah, pues pide permiso en el trabajo, no pasa nada....Noooooo, no señor, acuérdese que soy yo y ésto es lo que sucede:

Luego le dicen a uno bipolar, pero cómo uno no va a saltar de la extrema felicidad a la tristeza profunda si la sopresa divina que le tiene su novio, es lo que más ha querido durante todo el año más o menos y no puede ir porque tiene un puto examen pa ingresar a la puta maestría que fijo fijo pierde y no tiene ni maestría ni Circo del Sol.

Hágame un bien, si conoce a alguien que pueda cambiar la boleta para cualquier otro día (ooobvio, menos 17 o 18) o esos días pero por la noche, le RUEGO! me ayude. Con eso, hace la buena obra del día y San Pedro lo perdona y lo deja entrar al cielo.

UPDATE 27 de Octubre de 2010: Ya tengo boletas!!! Sí señor, yo soy terca y obstinada. Gracias a la magia de Internet encontré un par de personas que estaban en la misma situación que yo, tenian una ubicación menor pero igualmente buena, entonces terminé con buenas boletas, buena ubicación y plata! jeje. Estoy feliz!!!

UPDATE 08 de noviembre de 2010: Éste fin de semana estuve en el circo. Es sencillamente espectacular. Esperaba que fuera un poco más...luminoso, pero de alguna manera me hace pensar que es lo más lindo que he visto en toda mi vida. Te Amo baboso!!!

13 de octubre de 2010

Apreciado lector...

13 de octubre de 2010
Yo sé que hace rato no le escribo, pero tiene explicación: es porque he estado ocupada. Hace poco menos de una semana llegué de vacaciones en la tierrita (¿se acuerda que le conté?) y bueno, he estado en el proceso de adaptación al clima, al trabajo y a la falta de consentimiento, etc. Y es que 20 días lejos siempre son bastante para desconectarse.

Le confieso que he estado nostálgica…esa sensación de extrañeza frente a los dos lugares no se quita. Para el cumpleaños del blog de Antonio, escribí algo que me pasó estando allá y fue una sensación muy rara, para ver el post, pinche aquí  y se refiere a eso…en ocasiones me siento como perdida, como que no soy ya de ningún lugar. Yo sé que allá está mi hogar, mi familia, pero ya no es lo mismo…todo alrededor cambió; y obviamente me siento extraña aquí porque soy una pueblerina más con ínfulas de superioridad y con ansia de triunfo (¿si ve por qué me siento tan desubicada?)

Como apenas llegué y como era de esperarse, hay muchas cosas que hacer en el trabajo. Además de eso tengo pendientes un par de proyectos personales que si salen le cuento, tengo también como tres cursos virtuales en los que estoy y pues lo del proyecto con Expedición Sur…¿se acuerda que le también conté? Y el tiempo es escaso.

Le adelanto que tengo pendiente un resto de temas, entre ellos, quiero hablarle abiertamente de sexo…es que vi un artículo de Maria José Martínez que dice un montón de burradas que sinceramente me hacen pensar o que la vieja le ha ido muy mal (sitica, tan churra que es), o que definitivamente tiene muchas bolas para escribir ese montón de taradeces (y además, qué mal que escribe).

Pero bueno, como se ha dado cuenta, yo no puedo escribir cortico, siempre es como una diarrea mental en la que salen y salen palabras…y lo que le quería decir es que voy a estar ausente un poquito porque tengo mucho to do.

nospi
P.D.: Aprovecho para agradecer a las personas que aunque no se manifiestan con comentarios y demás (ya le dije que todos mis amigos son bajo perfil ¬¬), me han dicho que el blog les gusta y lo leen frecuentemente. A los que me han dicho que el blog no les gusta, pues...de malas :P, lea así sea pa criticar, que es gracias a eso que nos enriquecemos y no nos cegamos.

30 de septiembre de 2010

Sobre el amor y la amistad - II

30 de septiembre de 2010
Como lo prometido es deuda, aquí le dejo el segundo post sobre la amistad.

Como le dije, mi amistad con las niñas se complica a no ser que ellas sean como niños. Creo que es porque los niños son más descomplicados y a mí me da pereza ponerme con maricadas.

De mis amigos hombres hago énfasis en algunos:

Peque: Del peque ya les había hablado antes, él es el ex novio de dos de mis amigas de la sección anterior. Lo conocí en la Universidad, también es de Palmira y no merece ser mencionado porque es muy mal amigo. Es de esos descuidados de los que te enteras siempre por facebook, pero que igual cumple las características anteriormente mencionadas, y aunque hemos discutido, nos hemos dejado de hablar por mucho tiempo y ahora no sé casi nada de su vida, pues es mi amigo y lo quiero. Peque, si por casualidad lees esto: te odio.

Ricardo: Ricardo es un ser que suele no demostrar lo que siente, es un tipo que tiene una cuadrícula en su cabeza, es un viejito aunque ahora está dando muestras que está joven. Ricardo es un tipo muy inteligente y puede hacer cosas del carajo, pero por ciertos compromisos (a veces creo más impuestos que adquiridos), no hace todo lo que puede hacer. Con Ricardo es bacano sentarse a hablar paja, de política, de la vida. Y me encanta porque no es de esos sentimentales que se enojan cuando no los puedo ver. Es un ser demasiado racional, pero demasiado…y a veces me preocupa que no viva ni sienta por estar pensando.

El duro: la historia con el duro es bastante particular. Como les comenté antes yo llevaba gente a la universidad cuando trabajaba allá. El duro vino a ser uno de mis pasajeros. Al principio lo odiaba. El tipo no se callaba, siempre hablando y hablando y yo no soy así, especialmente cuando estoy manejando. Ese era mi espacio para pensar sobre las cosas, sobre lo que había pasado en el día y simplemente poner el cuerpo en piloto automático y dejar que la mente se fuera. El duro no me dejaba hacer eso, pues hasta que le dije. Además de eso, el tipo siempre era de esos hombres felices, optimistas, con la esperanza y la sonrisa siempre en la cara. Y yo detesto la gente así…es decir, para mí la tristeza y la nostalgia son sentimientos realmente inspiradores y son absolutamente necesarios en la vida. Fue mi pasajero como por dos años y el primer año fue un calvario, pero al segundo las cosas fueron cambiando hasta que ahora puedo decir que lo quiero mucho.

Antonio: Antonio, yo creo que este man es mi mejor amigo. Tenemos personalidades distintas (absolutamente distintas), pero debe ser por eso que nos llevamos tan bien. Él quiere que diga que no es un man bien, y bueno le doy gusto, no es un man bien ¬¬. Antonio se guarda todo (y como les dije, yo no me guardo nada), es complicado saber qué siente pero a veces llegamos a acuerdos. Es un man que la tiene clara, aunque a veces es un poco intenso con esto del emprendimiento y sus cosas del trabajo, pero pues se le perdona. Antonio y yo tenemos algo bacano, algo especial. Él sabe cuánto lo quiero. Yo creo que él me conoce más de lo que me conozco a mí misma, y cuando quiero buscar explicaciones o simplemente para hablar por horas y horas en el teléfono, ahí está. Antonio también es un man muy racional, a veces creo que él primero piensa y luego siente...a veces se le olvida pa qué está el estómago, las entrañas, el corazón...todo lo quiere encasillar en la cabeza...yo sinceramente creo que hay cosas que uno simplemente las siente y no las puede limitar a las palabras. Antonio y yo tenemos una promesa…faltan unos años, pero ahí está jeje.

Hay otros amigos que no quiero dejar de mencionar…tienen un gran espacio en mi corazón por diferentes motivos, hemos compartido cosas, momentos y vainas que los hacen especiales, pero es que si me pongo a hablar de cada uno, pucha, se me van 4 entradas más. Aquí están: Pedro, Chiqui, Juli, Alexis, Rubén, Ruthi (así nunca hablemos te quiero), Pipe (se está ganando un espacio en mi corazón por lo buen flatmate que es) y hasta el peludo. Si se me pasa alguno, no es porque no lo quiera, sino porque no tengo la cabeza bien puesta.

24 de septiembre de 2010

Sobre el amor y la amistad - III

24 de septiembre de 2010
Hoy es un día especial, así que me voy a saltar la parte II de estas entradas (la que habla de mis amigos hombres) y voy a hablar del amor. El baboso sabe por qué

Del Amor

Con respecto a esto, mi visión está un poco alejada de lo que todo el mundo piensa. Para mí, el amor es algo que dura para siempre; es por ésta razón que uno así de cagón como está, es muy difícil decir que se está o no enamorado. Uno siente muchas cosas que pueden llegar a ser amor, pero así como Jobs piensa que los puntos se unen en retrospectiva, yo pienso que sólo cuando esté vieja y arrugada, me doy cuenta si amé o no.

Ojo, no quiero que se confundan los conceptos. Sólo porque piense que vieja voy a saber si me enamoré o no, no voy a dejar de hacerlo…me explico: he dicho “te amo” mil veces, algunas de corazón otras por haberme dejado llevar por el momento. Lo que digo es que luego, es que me voy a dar cuenta si esas veces que dije “te amo” era REALMENTE amor. Es que mire, yo me pongo a ver lo que fueron mis relaciones y había sentimientos fuertes por esas personas, y escucho canciones y me acuerdo de lo bonito que era, pero a mí se me hace increíble que de un “amor así” (como creí tenerlo), ya no quede nada.

Tampoco tengo una definición de lo que es el amor, es simplemente algo que se siente, como la amistad, que se lleva dentro, se siente en el momento y se evalúa después. Tal vez luego si pueda decir para mí, qué es el amor, cuando lo tenga claro y cuando sepa si me enamoré o no. jaja pero me parecería muy cagada que bien vieja, me dé cuenta que el amor, nunca pasó por este corazoncito.

A riesgo de sonar más “drama queen” que siempre, puedo decir que para mí, “el amor” no ha sido una buena experiencia. Mi mamá siempre me ha dicho que tenga todos los novios que pueda; y pues chiquita nunca entendí por qué me decía eso. Ahora sí, pero no le voy a decir.

Yo no le voy a mentir, yo he puesto los cachos. Alguna vez pensé que era una zángana, pero luego me di cuenta que no, hasta juiciosa soy jeje. Mentiras baboso, tú sabes que sí.

Haciéndole caso a mi mamá, he tenido como unos 10 novios (novio, de esos que uno dice: ve, te presento a mi novio); la mayoría no han durado mucho. El primero duró como año y medio y se terminó porque la relación no sobrevivió a la transición colegio – universidad, obviamente estaba muy chiquita, pero aprendí. El segundo duró como año y ocho meses, pero no sobrevivió a la distancia. Con ese man aprendí muchas cosas (no piense porquerías), no le voy a contar cómo fue la relación…pero a grandes rasgos le puedo decir que con él aprendí que a veces es más duro soportar el dolor de la persona que uno quiere, que el propio. Aprendí que en la vida hay etapas que deben vivirse para no estarse desatrasando – o lamentando – después. Aprendí que los cachos no son buen negocio. Aprendí que lo que uno hace mal, tarde o temprano “se paga”. Aprendí a bajarle al orgullo y un montón de cosas que si usted me para bolas, después se va a dar cuenta a qué me refiero.

Los otros novios, me han enseñado cosas (pero algo así que uno diga uff, qué montón de cosas que aprendí, no) y que me perdonen si leen esto, pero yo creo que todos somos conscientes que han habido relaciones que te marcan más que otras, ¿no? Y bueno, no sé con claridad si esto sólo me pasa a mí o si otras viejas han experimentado lo mismo, pero yo creo que las viejas pasamos por etapas en estas cuestiones del “amor”, y bueno, eso está ligado a la madurez y al grado de comprensión de las cosas.

He visto que las viejas pasamos por tres etapas. Todo depende de cada una, pero generalmente cuando uno empieza a experimentar las hormonas y le empiezan a gustar los manes, nos fijamos más en los tipos “populares” y los que nos pueden dar cierto tipo de seguridad. Es por eso que empezamos a experimentar el man mayor (nosotras estábamos en noveno y nuestros novios estaban ya en la universidad), el tipo popular, algunas se van por los tipos bonitos, grandes (musculosos), y ese “primer amor” generalmente dura mucho tiempo y es tan lindo que uno queda todo traumado. Yo tengo compañeras que desde el colegio estaban cuadradas con manes que las veían como las “novias eternas” y amparados en esa “seguridad” que las viejas sentían, hacían y deshacían y ellas, asumo yo, por su tranquilidad (pajazo mental más bien), se hacían las locas.

La transición a la segunda etapa pasa tan suavecito, que uno no se da cuenta. Es tal vez ese mismo mancito con el que uno está cuadrado y que antes era tan lindo y del que nos enamoramos y creímos que era el man de la vida, que se “transforma” en un ser despreciable, pero que estamos tan acostumbradas a esa relación linda que creemos que es sólo una etapa y confiamos en que las cosas van a cambiar. Pero mentira! La “etapa” del man fue al contrario, sólo se portó divino para que uno se tragara y después solamente se comporta como realmente es. Yo sé que esto está sonando muy resentido, y yo sé que no todos los manes son así , seguramente ellos también pueden hablar de sus etapas, si es que las tienen, pero repito, lo que digo es solamente producto de mi experiencia y de lo que he podido ver de algunas personas que han estado a mi alrededor. En estos años yo no sé qué pasa y a uno se le meten cosas en la cabeza y empiezan a salir todos esos issues raros. A uno definitivamente le da ese delirio de rehabilitar gamín y se mete con tipos patanes y uno aprende. Ésta etapa para mí fue la más importante…fue donde supe quién era yo y qué tipo de man quería yo a mi lado. Uno se entrega y creería yo que es más por orgullo que por otra cosa, que uno está al lado de un man que no valora lo que uno es; es decir, uno cree que con el esfuerzo y el amor que uno imprime a la relación, es suficiente para el que tipo cambie. Eso NO pasa. Yo creo que uno cambia cuando se enfrenta a experiencias que realmente tocan el ser y eso no pasa con el profundo amor y los sacrificios que uno como vieja, tiene hacia ese man.

Lógicamente en ésta etapa no todo es culpa del man. Uno como vieja también tiene curiosidad de experimentar ciertas cosas y cambia y éste es realmente el momento para hacerlo. Aquí fue donde yo monté cuerno y me di cuenta que no era buena idea. Infortunadamente cuando la gente aprende cosas, afecta a su entorno y muchas personas pueden salir lastimadas.

Por último, como uno ya sabe qué es lo que quiere, pues es más selectivo. Ya uno empieza a buscar al tipo con el que puede hablar, con el que puede compartir todas esas experiencias que tuvo y que hacen que uno sea como es y principalmente que el tipo no se aleje por lo que uno le cuenta, sino que al contrario, valora toda esa ñola que uno se comió. Éste será un tipo inteligente, lleno de defectos como cualquier persona, pero que cumple los “temas grandes” de esa lista de requerimientos que uno como vieja tiene para el “hombre de su vida”. Luego le cuento cuál es mi lista.

Creería yo que la tercera etapa es a lo que todos queremos llegar. Encontrar a esa persona con la que uno quisiera compartir el resto de la vida, la que entiende y comprende, la que está ahí y que uno sabe que puede confiar sin temor a que esa confianza sea vulnerada. Pero a veces es tan difícil encontrar esa persona, que a veces nos creemos el cuento que debemos estar es con las personas que nos quieren y no la que uno quiere para su vida. O también puede pasar que uno nunca sale de la primera o la segunda y por siempre está ejerciendo la labor de Sor o que vive en una mentira constante. O pues también puede pasar que las etapas pasen, pero no en el orden en que yo acabo de describirlas; a cada quién le llegan los momentos cuando los necesitan, y las cosas no pasan porque sí. Como dice mi versículo favorito: “Todo tiene su tiempo y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora”

Yo creo que estas experiencias deben vivirse lo más temprano posible. Uno tiene más resistencia al dolor cuando se está más joven y por miedo uno no puede estar alargando un sufrimiento que después va a ser más difícil de tolerar. El tiempo pasa y las heridas se curan, pero como le dije, las vainas pasan cuando deben de pasar, no antes ni después.

19 de septiembre de 2010

Sobre el amor y la amistad - I

19 de septiembre de 2010


El día del Amor y la Amistad (el comercialmente conocido) ya pasó, pero entenderá que estoy en mi casa, pasando tiempo con mi familia y mis amigos, entonces se me ha hecho un poco complicado dedicar el tiempo suficiente a estas labores; además se “celebra” todo el mes y al fin y al cabo, el “Día del Amor y la Amistad”, son todos los días, esta vaina es sólo una cosa comercial pa vender. Pero bueno, ese no es el punto.

Como le prometí, aquí está. Es largo, así que si no tiene tiempo, pues regresa después, no hay lio. Al parecer, voy a tener que poner varias entradas porque quiero contarle cosas sobre ambos temas.
De la amistad

Creo que hay muchos conocidos y realmente pocos amigos. La palabra “amigo” siempre se me ha hecho difícil de explicar, yo sólo lo siento y eso se siente con el tiempo. No puedo encajar en una definición a esos a los que yo considero mis amigos, simplemente los llamo así por las cosas que hemos pasado juntos; por la capacidad que tengo yo de confiar en ellos; por lo que son capaces de hacer por mí y viceversa; porque así pase el tiempo simplemente ahí están, y nuestra amistad está intacta; porque somos capaces de pasar por malos ratos; porque entienden que soy de x manera y porque yo soy capaz de entenderlos y aún así quererlos; porque hemos construido cosas que ni el tiempo, ni la gente, pueden desbaratar y por muchas cosas más que si me pongo a decirlas, se me acaba el espacio.

Yo generalmente tengo más amigos hombres que mujeres. No sé por qué, pero me es más fácil entablar una amistad con un man que con una vieja. De pronto es porque tengo mucha cosa de man y me parece que las viejas somos cositeras y envidiosas y eso se evidencia más con una amistad del mismo género.

Crecí en un colegio de niñas, así que por supuesto cuando chiquita tuve más amigas que amigos. Recuerdo de mi infancia/adolescencia varias amigas, obviamente hubo más, pero a ellas las recuerdo por cosas especiales:

Susana: Fue mi primera amiga, la conocí como en kínder o primero. Tal vez ella iba a mi casa (mi mamá no me dejaba ir a la casa de mis amiguitas, por qué? Ni idea). Nuestra amistad duró toda la primaria. Hacíamos las tareas juntas, compartíamos la lonchera al recreo y demás. Sentí celos cuando llegó Aura en cuarto, pero aprendimos a ser amigas las tres. Nos separaron de curso en sexto y no seguimos siendo más amigas. No recuerdo cómo era ella, ni de qué hablábamos ni nada…estaba muy chiquita. Creo que Susi ahora está en Medellín y si no estoy mal, estudió algo así como biología.

Isabel: Isabelita, yo creo que Isabelita es la mejor amiga que alguien puede tener. Nos hicimos amigas en sexto. Nos conocimos en una misa y fuimos inseparables todo el año. En sexto me operaron de apendicitis y todos los días Isabelita después del colegio, iba a mi casa a enseñarme lo que vieron en clase y a desatrasarme. Yo no supe valorarla mucho. En séptimo nos separaron y fuimos amigas un tiempo, luego ya no más (creo que fue mi culpa). Isa ahora está en Estados labrándose un excelente futuro.

Camocha: Empecé a ser amiga de Camocha creo que en noveno. No me acuerdo por qué, seguramente por cercanía de puestos o algo así. Fuimos amigas hasta bien entrada la Universidad. Hubo un lío raro con Camo…cuando yo ya estaba en la U, me hice muy amiga de la que actualmente es mi mejor amiga. Mi mejor amiga se cuadró con un amigo de la U, duraron no sé cuánto tiempo y terminaron. Cuando ellos terminaron, Raúl (el amigo de la U) se cuadró con Camocha (obviamente yo se la presenté). Ellos tuvieron su relación pero Camo era un poco desconfiada y alguna vez creyó que yo le estaba ocultando “cosas” que habían supuestamente pasado entre Kimy (mi mejor amiga, ex novia de Raúl) y su novio. Ella nunca entendió que en ese triángulo en el cual yo era el punto en común de todos, yo no quería estar. Yo no tenía por qué contarle cosas de su novio, ni cosas de la ex de su novio, que era mi amiga por cierto…lo más sensato fue alejarme de esas relaciones y ella lo entendió como una traición. Me pareció muy triste que ella se enojara por eso, pero si ella no quería ser mi amiga, yo no podía obligarla. Eso tuvo que haber sido hace unos cuatro o cinco años, hasta ahora no sé nada de ella. Qué lástima.

Kimy: Kimy, mi incansable compañera de aventuras. Kimy ha estado ahí firme, en los buenos y en los malos momentos. La amistad con Kimy comenzó hace casi 10 años, en el primer semestre de la universidad…simplemente nos encontramos, fue natural. Ahí estamos…ella es la definición de una buena amiga, de mejor amiga. Confieso que la admiré desde que la conocí…tenía todo tan claro! Y eso era cuando teníamos 17, sabía qué quería, para dónde quería ir…y confieso que sin saberlo, me enseñó taaanto. Muchas de las buenas cosas que tengo y de los ideales que me planté, fue por Kimy. Además de eso, ella es también la definición de “pa’ las que sea”, se pone la camiseta y la vive, es consistente entre lo que piensa, dice y hace…y eso es tan difícil de encontrar. Ella sí que tiene cosas de niño, juega fútbol, tiene cualquier colección de videojuegos, bebe como un animal y no se emborracha…yo creo que por eso es que la quiero tanto jeje…ay amiga, como te extraño.

De ahora “grande” puedo añadir a una amiga a la lista:

Lombi: Lombi es mucho más chiquita que yo y por eso yo creo que he tomado una actitud como de hermana mayor. Lombana si es un niño completo, ahí no hay nada que hacer. La conocí porque yo trabajaba en una Universidad y ella estudiaba allá. Ambas vivíamos en Palmira y yo tenía carro y transportaba gente. Ahí cayó Lombi y fue cuestión de días para hacernos muy amigas. Lombi es inteligente, a veces ingenua, pero noble. Le han pasado cosas y ha aprendido, pero seguro seguro le falta muchísimo más por aprender. Tuvimos una discusión alguna vez por algo que ya ni me acuerdo qué era, pero como somos amigas, ya pasó y volvimos a ser nosotras de nuevo.

Claro tengo más amigas: Claudia, Anita, Julieta ahora trabajando (es mi única amiga en Bogotá con quién tengo contacto permanente) y hay muchas con las que me encantaría retomar contacto…pero como yo soy mala amiga, pues no lo hago.

Después le sigo contando cosas...la próxima habla de mis amigos hombres y la(s) otra(s) tratará(n) de la otra parte de la fecha, del "amor"

Un abrazo

14 de septiembre de 2010

Cavilando, cavilando...

14 de septiembre de 2010


Apreciado lector,


Yo sé que le dije que iba a publicar cosas sobre el amor y la amistad aprovechando la fecha, pero hoy tuve una conversación bastante productiva con un muy buen amigo que me dejó pensando sobre ciertas cosas que quiero compartir con usted. Igualmente voy a publicar lo que le dije, yo le cumplo.


Anoche empecé a leerme un libro que quería leer desde hace mucho tiempo, pero que “no había tenido tiempo”. Llevo cuatro hojas y me encanta; aunque dice ciertas cosas que hiere susceptibilidades, el fondo es realmente lo que me cautiva.


El libro habla de los tres estados del espíritu: camello, león y niño. El camello es el estado en el que absorbemos todo, nos llenamos la cabeza de cosas y empezamos a cargar con ciertos lastres básicamente impuestos por el entorno, que lo único que hacer es aperezar el paso. El león es el estado en el que nos revelamos contra todo eso que nos impusieron en el pasado y dejamos la puerta abierta para que venga el niño a crear.


Hoy almorcé con Juan, que es un hombre extremadamente curioso por sí mismo y se ha tomado el trabajo de empezar a conocerse. Le conté que estaba leyendo ese libro y empezó una de las tantas conversaciones que hemos tenido y que de verdad, me dan ganas de grabar.


En este momento estoy tratando de recoger la mayor cantidad de cosas de las que hablamos, pero se me hace imposible de recordar todo. Creo que hablamos de tres grandes temas: el que les acabo de mencionar, la conexión con la tierra y la capacidad de sentirnos vivos y el poder caer en cuenta de las cosas simples.


El primer tema habla por sí solo. Como me decía Juan, en su continua observancia de lo que hay a su alrededor, y esto incluye máquinas hasta los seres humanos (es ingeniero de sistemas), él ha caído en cuenta que ese “deber ser” que te imponen desde que naces, te lleva a ser como un computador, donde te instalan ciertos programas que responden a ciertos comandos. El objetivo ulterior sería entonces nosotros como seres humanos, poder desautomatizarnos y poder responder a ciertas situaciones de manera diferente, porque es que no hay una única respuesta para todo. Yo siempre he pensado que la tintura de la vida es embarrarla, cometer errores para sencillamente aprender. Le tenemos miedo al miedo, pero dos características del miedo es que te ciega y tiende a magnificar la situación. Y son estas experiencias las que te llevan a aprender, a comprender lo que alguna vez tu cabeza pensó. Yo estudié la carrera que me gustaba, aprendí muchas cosas, pero como dice algún man por ahí “La educación es algo admirable, sin embargo, es bueno recordar, que nada que valga la pena se puede enseñar”. Yo no puedo enseñarle a usted a ser novia, madre, hija, hermana, amante o jefe. Si me hago entender? Todo lo que a uno le meten en la cabeza cuando está estudiando una carrera, son sólo conocimientos técnicos que en su gran mayoría no se pueden aplicar a la vida del SER HUMANO. Y traigo aquí a colación una frase que me dijo Juan que me dejó pensando mucho: “Y, al fin de cuentas, ¿qué es la vida? La vida es todo aquello que ocurre mientras yo estoy ocupado”. Pfff, tenaz no?


La conexión con la tierra y la capacidad de sentirnos vivos: no sé por cuál fue el hilo conductor para llegar a esto, tal vez usted se meta en este cuento y deduzca por si solito. Yo le contaba a Juan dos cosas. La primera es que alguna vez me vi una parte de “Ray” (la película sobre aquel cantante y pianista ciego) donde el hombre almorzaba con una mujer (que después sería su esposa), ella hizo algo que lógicamente él no podía ver y ella le preguntó que como sabía eso, él le dijo: “lo supe de la misma manera que sé de ese colibrí afuera”. La segunda cosa fue una experiencia mía en Amazonas. Íbamos en una caminata por la selva (primaria obvio) y de repente el cielo se puso oscuro y empezaron a caer cosas de los árboles y a sonar cosas extrañas; luego nos dimos cuenta que habíamos entrado a la selva sin “su permiso” y simplemente se estaba manifestando. El guía, un indígena de la zona, mientras caminaba mambeaba y hablaba con ella. Inmediatamente despúes, el cielo se despejo y dejaron de sonar vainas raras. Lógicamente yo no me di cuenta de ese suceso, fue después que nos dijeron qué era lo que había pasado. Y lo que me pongo a pensar es que a veces estamos tan imbuidos en el concreto, la contaminación, los ladrillos, los computadores, que dejamos de lado esa conexión con la tierra tan necesaria. Y no es sólo la conexión con la tierra, el aire, los sonidos…es la conexión con lo profundo de nosotros mismos. En esta parte Juan me contó algo de su hermana. Ella estudia comunicación social y alguna vez estaba peleando con un texto, lo que le dijo Juan es que no se predispusiera y que no antepusiera lo que ella pensaba a lo que estaba leyendo, porque así, no iba ni a aprender, ni a entender nada. Lo que hicieron fue que ella le leyó en voz alta y él me contó lo que escuchó: era un hombre que había perdido la vista y aún así hace las mejores fotografías. Decía que el tipo al perder la vista, había dejado de encerrarse en lo que sus ojos captaban y entró en su mundo, donde aprendió a conectarse tanto con su entorno y a escuchar a lo que estaba a su alrededor, donde no necesitaba de la vista para captar momentos “de foto”. Y es que a veces se nos olvida sentir o peor aún, nos da miedo. Nos da miedo amar, confiar, extrañar. Le tenemos miedo a quedarnos sin piso, pero acuérdese que el miedo hace de esas situaciones aún más grandes de lo que son.


Poder caer en cuenta de las cosas simples: la semana pasada sentí mucho miedo porque creí haberme quedado sin empleo. Mi primera reacción fue decir que me devolvía para Palmira, y obviamente el baboso me regañó. Yo empecé a pensar en qué iba a pasar, me armé un video de talante caliwood y si no era porque estaba en la oficina, me ponía a berrear de inmediato. El baboso me dijo que se había decepcionado de mi respuesta, puesto que no pertenecía a la “mujer berraca y echada pa’lante que a él tanto le gustaba”. Lo único que tuve para decirle, y que creo se justificaba en mi sensatez fue decirle: “decepciónate cuando llegada la hora, efectivamente no haga lo que deba hacer”. Hablando de esto con Juan (ya les dije, el centro de la conversación era él y su incansable búsqueda), me contó una historia de la que usted mismo puede sacar conclusiones: La vecina y el martillo: un tipo necesitaba un martillo y se lo iba a pedir prestado a la vecina, pero empezó a pensar: “ah, esta señora no me lo va a prestar, uhm, pero por qué no habría de prestármelo, ah pues porque es toda odiosa y mínimo y dice que no tiene, ah de pronto si me lo presta”…y así estuvo una hora, cuando por fin se decidió a ir donde la vecina, ella le abrió y le dijo: “buenas, qué necesita?” y él le dijo: “sabe qué vieja hp, métase ese martillo por el c***o”, y se fue. Otra vez, lo que estamos pensando es que hay tantas veces que uno piensa y piensa sobre ciertas cosas que llegado el momento de actuar, uno está tan agotado sobre pensar sobre ello, que no hace nada.


Otros temas de los que hablamos, pero que no están enmarcados en ninguno de los gruesos de los anteriores, pero los toca igual y que no me extiendo porque quedaría una entrada kilométrica, pero de pronto después profundizo: Las ganancias derivadas del riesgo (lo que es tirarse al vacío y descubrir lo mágico de lo incierto -para esto es recomendable también leer: “De la esterilidad de la certeza a la fecundidad de la incertidumbre” de Manfred Max-Neef-). Todos somos locos normales, los locos de manicomio son aquellos que tal vez han visto más allá y que no saben qué hacer con toda esa información, aquellos que no pueden adaptar lo que han descubierto a lo que la humanidad ha creado (es por esto que a nadie le gusta mirar para adentro). Es muy complicado alinear REALMENTE el pensar con el hacer, es difícil quitar esos filtros que se nos hacen en la cabeza cuando “crecemos” y dejamos atrás a ese niño que es congruente entre lo que piensa, hace y dice. Reevaluación de nuestras relaciones: De verdad estamos tratando con el ser de cada quien o los medimos solo por su utilidad y cuando ya dejan de servirnos, desechamos esa relación y se deja de un lado ese humano que está adentro. Poder adaptarse a las situaciones y tener esa actitud guerrera frente a la vida, no es solo cuestión de actitud, es también empezar a trabajar con el desapego a lo que no nos sirve.


Ahí le dejo pa que piense un rato. Yo no sé usted, pero yo quedé bien alerta.