30 de noviembre de 2010

Noticias y próximas publicaciones

30 de noviembre de 2010

Yo sé que a usted no le importa lo que le prometí, que seguramente ni se acuerda que le dije que iba a publicar sobre el artículo de Maria José Martínez en SoHo, pero me puse en el trabajo de revisarlo y cumplir mi promesa, pero no pude. Iba a publicar ese post, pero le juro que estaba muy malo. Las conclusiones son: SoHo apesta y apesta mucho, yo no soy nadie para criticarle los polvos a la gente y Maria José Martínez es muy bonita pero le ha ido muy mal.

Por otro lado, le adelanto que pasé los exámenes a la maestría! Hoy revisando los puntajes me hormigueaban las manos del susto. Me fue bien y estoy feliz :) Infortunadamente todavía no sé si pasé o no en la maestría; falta enviar el pre proyecto de grado (que estoy absolutamente jodida) y la entrevista, que ahí descabezan a unos cuantos, espero no ser yo.

En éste momento me siento cansada, con sueño, de mal genio y tengo muchísimas cosas que hacer, entre ellas el proyecto de turismo, pre proyecto de tesis, curso de inglés, curso de cooperación, trabajo del trabajo, arreglos navideños en la oficina y todo es para ésta semana. Me tomo el tiempo de escribir porque a pesar de fijar los ojos, es un espacio donde me relajo y distraigo.

Comenzó diciembre y por lo general uno en estas épocas uno reflexiona sobre el año que pasó. Si usted me ha parado bolas, sabe que yo vivo en continua crisis y que esas "reflexiones" son más que recurrentes en mi, pero el punto es que el próximo mes va a estar completamente dedicado a mi, a lo que aprendí éste año, lo que me gusta, lo que no, etc. Luego no vaya a decir que qué mamera leerme, que todo el tiempo hablo de mi, que bla bla bla, porque le estoy advirtiendo. Si no quiere, pues no pase.

De antemano le pido disculpas porque esto puede estar ilógico; perdóneme si le hice perder el tiempo leyendo esto tan de baja calaña, pero ni siquiera estoy pensando. Quién sabe qué neurona es la que está procesando...seguro una de las afectadas por el fin de semana jeje.

26 de noviembre de 2010

¿Quién se cree?

26 de noviembre de 2010

He tenido ganas de escribir algo, algo sobre el mundo, sobre lo que pienso de la demás gente, ya no más sobre mí y mis estupideces. Veo actitudes, escucho voces incongruentes, veo a la gente dando tumbos. Critican, hablan, odian, aman, se creen tan importantes como para que a la otra gente le importe lo que piensan. Me da asco ver que su rebeldía es una rebeldía sin causa…o bueno, tienen causas, pero son ajenas. Les parece que está bien usar las palabras de otros para justificar su inconformismo. Todos son iguales, tratan de alejarse de sus miserables vidas amparados en defender sus derechos de libre expresión vociferando palabras soeces y diciendo: “jódanse, me importa un culo lo que digan de mi, critiquen lo que quieran que tienen su vida retorcida”. Ellos mismos están cayendo en lo que tanto critican; están hablando de los otros, de lo que piensan, de lo que creen; juzgan bajo su ojo estúpido y pequeño y se hacen los tontos con la incongruencia entre su cabeza y su lengua.

Se creen libres porque no les da pena de hablar de cómo les dan de rico por el culo, o porque se sienten capaces de decir que se fuman un porro o porque no les importa emborracharse, fumar, pelear, insultar, o porque no les tiembla la voz cuando se refieren con ofensas a Dios.

Se creen con la última verdad, creen – como yo- estar claros en todo, discernir entre lo bueno y lo malo, diferenciar entre lo cierto y lo falso. Se creen genuinos o auténticos por ir en “contra” de lo que “todo el mundo” piensa, dice o hace. Critican a los que tenemos un trabajo y estamos inmersos en un sistema, critican a los que creemos en un Dios, a los que escuchamos música comercial y leemos libros comerciales.

Y sí, me molesta la incongruencia, me choca que me exijan cordialidad y respeto cuando no son capaces de darme lo mismo. Me molesta que se crean indispensables y tan importantes como para no mirarme a los ojos cuando hablo. Me molesta en sobre manera que ataquen cuando les hace caer en cuenta de sus errores y que su prepotencia esté por encima de su sensatez.

Pero quién soy yo para hablar de otra gente, acaso me creo tan importante como para que les importe lo que yo pienso? Acaso esa soberbia que dicen que nada en todo mi ser está llegando de verdad a mis ojos y mi cabeza y no me deja ver otras cosas?

24 de noviembre de 2010

"Resuelve para i"

24 de noviembre de 2010

Confieso que “el amor” se ha cagado en mí, como antes yo me cagaba en él.

Yo creí estar enamorada dos veces en mi vida. La primera vez, fue con mi segundo novio. Yo tenía 16 y aunque nunca pensé en un futuro con el tipo, él me hizo saber qué podía llegar a ser el amor. Él es el hermano de una niña que solía ser mi mejor amiga (hablé de ella en el primer post de la amistad, por si no se acuerda, pinche aquí), tiene 5 años más que yo, y en ese tiempo era igualito a Smeagol. Nos cuadramos el día de mi cumpleaños número 16 escribiendo cosas en un papel…creo que todavía lo tengo. El tipo me conquistó con detalles: flores, cartas, palabras muy lindas. Duramos como año y medio pero no logramos sobrevivir mi entrada a la universidad. Mi mamá siempre me ha cuidado mucho y en la época de colegio, era poco lo que salía y claro, el entrar a la U uno tiene una libertad absurda que para niñas tontas como yo, es imposible de manejar. Al principio me dio durísimo, duré como tres meses con resaca, pero luego el tiempo hizo lo que tenía que hacer.

La segunda vez que creí estar enamorada, fue con mi tercer novio. Sí, justo después del que les acabo de mencionar. A diferencia del anterior, éste no tuvo que conquistarme, yo caí rendida desde que comenzamos a hablar. Es un tipo alto, inteligente, versado, recorrido, aunque menor que yo; alguna vez una vieja amiga de un amigo, dijo que él era como un "ken" pfff. Infortunadamente las cosas no terminaron igual de rápido que como empezaron, teóricamente terminamos hace como 7 años, prácticamente hace como 1. Con esto me refiero a que a pesar de que yo tuviera novio o él tuviera novia, siempre había algo. No podíamos desprendernos y cuando él iba a Palmira o yo venía a Bogotá, salíamos. Yo la embarré con él y supo aprovecharse muy bien de eso…por la culpa que yo sentía, creía que él podía hacer conmigo lo que quisiera y siempre terminaba aguantándomele cosas horribles, hasta que hace un año cortamos del todo.

Después de estas dos y otras experiencias que realmente me hicieron comer mierda, me volví prevenida, desconfiada, apenas alguien se interesaba en serio en mí yo salía corriendo, evitaba cualquier relación seria (así fue como en un año tuve como 4 novios) y creía que si evitaba enamorarme, pues no iba a llorar más. MENTIRA! Me topé con el más hdp de todos los hombres, del cual creí estar enamorada, pero viéndolo en retrospectiva, sólo estaba encoñadísima. Sin enamorarme, sin tener una relación o por lo menos un vínculo sentimental, éste man si que me hizo sufrir. “Duramos” como dos años, y lo pongo entre comillas porque como él mismo me lo dijo, entre nosotros nunca hubo nada. Nos veíamos esporádicamente, cuando las fiestas o las salidas a beber al parque así lo permitían. Él tenía otras viejas y no ahorraba esfuerzos en que yo me diera cuenta y yo como una vil pelota sólo estaba con él. Las cosas terminaron cuando ya tocaron fondo…un miércoles cuando por fin pude decirle todo. El tipo me dijo que yo era muy buena para él, y tenía toda la razón…y no es que yo fuera muy buena, es que el man es una porquería. Con él aprendí a darme a mi lugar, aprendí a respetarme y a valorarme, aprendí qué quería y qué no quería de un man; y creo que fue gracias a él que puedo decir en éste momento: estoy enamorada.

Cochi fue la primera persona que conocí cuando llegué a Bogotá y desde que lo vi, me gustó. Salimos algunas veces, pero nada serio, igual yo estaba cambiando un montón de cosas y lo que menos quería era que alguien me desestabilizara un aspecto en el que estaba tranquila. Pero pues nos empezamos a conocer y él se dio cuenta de lo grandiosa que soy (jaja). El 24 de febrero de éste año, decidimos dar un paso más y cuadrarnos. Desde entonces hemos tenido una pelea y todos los fines de semana son más bacanos que el anterior.

Las cosas van normal, sin apresurarnos y sin presiones de ningún tipo; tenemos todo el tiempo para ser. Mi novio es un tipo serio, juicioso, buen niño…muy diferente a las lacras con la que estaba acostumbrada a salir. Es medio loco y muy muy ñoño, cosa que se refleja en su particular manera de decirme que me quiere.

Ésta es una ecuación que se la dejo apreciado lector, para que la haga y se dé cuenta cuánto me quiere mi novio: "Resuelve para i: 9x - 7i > 3(3x-7u)”

Te Amo baboso, felices 9 meses

15 de noviembre de 2010

Del autosabotaje y otras decadencias

15 de noviembre de 2010
A veces no le ha pasado apreciado lector, que quiere algo tanto tanto que le da miedo no tenerlo o perderlo en el intento de tenerlo y piensa en autosabotearse? Algo así me pasa a mi. Le tengo miedo al fracaso, le tengo miedo al juzgamiento, le tengo miedo a no poder alcanzar. Yo no sé si le conté, pero intento entrar a una maestría que ojalá fuera como las demás. A ésta maestría se puede entrar sólo pasando 6 exámenes, una entrevista y que estén conforme con su pre proyecto de grado (es una maestría muy buena y muy barata, por eso tanto filtro).

Exáctamente lo que le acabo de decir, me pasa con los exámenes de la bendita maestría. Sí, ya son ésta semana y aunque ya caí en cuenta de la estúpidez que estaba por cometer y encaucé mis andares, le voy a contar qué fue lo que me pasó.

Un día, hace como dos semanas, entré de nuevo en crisis y lo que mejor me pareció pensar en ese momento fue: "bueno, si no estudio, pues no paso y así tendré una excusa para no sentirme tan triste...porque si estudio y paso, la única justificación es que vos sos bruta y no sos capaz de hacerlo". Entonces lo más lógico en ese momento fue echarme a las petacas y si no pasaba, pues era obvio, no estudié y si pasaba, sencillo, era una genio.

En éste momento sigo pensando que es una grandiosa idea (en serio), pero otra parte de mi, al parecer más fuerte y temeraria que la anterior, le hizo caso al regaño del baboso, y me obligó a estudiar. En éste momento estoy repasando lo que creo que es básico de Ciencia Política y pronto me dispondré a repasar un poco de Francés, que sé igual que me lo voy a tirar porque no tengo ni pito de idea de francés, pero bueno, escuchar a Manu Chao y Francis Cabrel depronto me ayudan.

Sigo creyendo que no estoy preparada para que mi cédula aparezca en la lista de los petardos que no pasaron, pero supongo que si eso llegase a pasar, me echo a llorar por ahi dos días y empezaré a pensar que por ahora no me conviene (maldita sea! cómo no me va a convenir hacer una maestría!!!) y seguiré estudiando para pasar los próximos exámenes o trataré de quebrarme el c***o para conseguir plata y pagarme una más cara.

Le prometo que si paso le cuento, y si no, pues me desapareceré un mes hasta que sea capaz de darle la cara y reconocer que hubiera sido mejor idea seguir autosaboteándome.

Manténgame en sus buenos pensamientos, mándeme buena energía, ore - rece por mí que yo trataré de conservar la calma y recurriré a mi capacidad de análisis y buen criterio para dar lo que tengo en pro de pasar la bendita maestría.

Un abrazo

UPDATE 22/11/10: Todavía falta una semana para los resultados. Quisiera pensar que no hay duda alguna que voy a pasar, y realmente a veces esa idea se concentra en mi cabeza, pero no puedo mantenerla. Tal vez 104 personas más están pensando lo mismo...y las compadezco. Presenté los exámenes, estudié, me dolió la espalda y el cuello...fue una prueba más de resistencia que de conocimiento, y confieso que se siente bien haber hecho lo correcto: esforzarse y dar lo mejor de sí. Si resulta, regio...todo será peor; tendré que levantarme a las 5 de la madrugada, gastar plata en taxi y fotocopias, salir y correr para el trabajo, trasnochar haciendo tareas e invertir tiempo de mi fin de semana en ensayos y presentaciones. Si no sale, supongo que algo mejor vendrá después. No sé cuál es la probabilidad de pasar o de quedarse...y la verdad, no me importa, tengo susto y no quiero saber cuantos politólogos o profesionales en relaciones internacionales compitieron conmigo (mi descanso está en pensar que hubo muchos ingenieros :P). Sé que no es gran cosa si paso y tampoco si no...el mundo no se me va a acabar, pero qué fresquito daría.

8 de noviembre de 2010

Parezco sicóloga, qué mamera...

8 de noviembre de 2010


En serio estoy por creer que algo anda mal con mi cabeza. No sé si sea normal, pero todo el tiempo estoy cuestionándome, todo el tiempo estoy reevaluándome, todo el tiempo estoy sintiéndome en el lugar que no es. Todo el tiempo estoy pensando sobre mí, por qué hago lo que hago, por qué la otra gente hace lo que hace…

Ésta vez, la crisis se desató por una vaina que ni siquiera creo. Estuve en una capacitación de "Habilidades Gerenciales", y como ya los “coaches” no saben qué más inventarse, pues todos hablan de PNL. De entrada “programación” es una palabra que me cae gorda, yo no soy un computador para que me programen. Neuro – lingüística, me parece fabuloso poder alinear lo que uno piensa con lo que dice y hace, pero en mi caso, dudo muchísimo que eso se logre a través de cursos y maricadas de esas. Confieso que me encanta todo lo que me pueda revelar algo más de mi, aprender a descubrirme, aprender a convivir conmigo y conocerme…eso se me ha hecho completamente imposible, yo no sé ni siquiera quién soy y para qué putas estoy aquí. Esto fue lo que desató la crisis. La PNL se basa en conocerse para uno cambiar lo que no funciona y dirigir su vida hacia un objetivo trazado. Esto suena bonito…pero yo no lo creo. Primeramente porque no considero que los cambios se hacen así porque sí; para mí un cambio nace de una experiencia vital que recae directamente sobre el ser, el resto serán puros pajazos mentales. Segundo, a mí, no me ha funcionado tener un plan. Admiro realmente a quienes llevan su vida organizada, que se rigen por lo que alguna vez se trazaron y todo lo hacen por ello. Yo declaro eso en mi vida, un imposible.

Yo sé que estoy muy chiquita, y que todavía me falta mucho pelo pa’ moña, pero de lo que he vivido hasta ahora, es de lo que puedo hablar, y eso es lo que trato de hacer: mi vida ha estado llena de giros, de cosas malas, de cosas buenas, de ires, de venires, de estar aquí, allá, de pensar esto y lo otro, de cambiar. Hace no más dos años lloraba porque me cambiaron de oficina (sí, lo más banal, nada más que un cambio de espacio físico, sólo eso….perdón, solo eso), pero eso tal vez se debía a que me estaba descubriendo y eso asusta (ya ve por qué le digo que parezco psicóloga, fó!). Viéndolo todo desde acá y viéndolo en macro, toda mi vida he querido cosas distintas y las he probado.

Yo simplemente no puedo pensar que todo lo que vengo a hacer en el mundo, lo tengo escrito en un papel. Yo tengo las cosas grandes, las etéreas, las que no puedo encasillar en un “cómo” o en un “así”. Yo quiero transformar realidades, yo quiero cambiar el mundo, yo quiero ayudar, yo sé a través de qué (mi cabeza y mis manos), pero aún no puedo saber cómo. Es cierto, la cabeza funciona por objetivos, pero los míos son a corto plazo, no son tan ambiciosos, y sé y confío que todos esos objetivos se unen en algo muy grande, pero me queda imposible ahora, decir qué es eso tan grande. Yo creo que la misión de uno en la vida no se puede determinar ahorita. Los puntos no se unen en perspectiva, lo hacen en retrospectiva.

Me pusieron a “visualizar” el futuro, me pusieron a pensar quién iba a ser la Luisa de 10 años más adelante, de 50 años más adelante. Y no pude verla claramente. En 5 años pude ver a una vieja en medio de la selva despidiéndose de toda una comunidad indígena. Luego, vi una familia, luego vi una viejita en una casa de campo contándole historias a sus nietos, sobre sus viajes a la selva y el por qué de su tatuaje.

Apuntar todo y enfocar las fuerzas para lograrlo, le quita el tinte a la vida. Me decían que era un solo camino: adelante el futuro, atrás el pasado; “NOOOOOO” fue lo que pensé. En primer lugar mi pasado no está atrás…está a mi lado, si quiero echar mano de él y coger todo lo que aprendí, el que esté atrás es una pérdida de tiempo…tendría que girar (darle la espalda al futuro por si no me hice entender), buscar lo que quería y quién sabe qué tantas cosas me perdí por estar mirando atrás (asi sea pa encontrar algo que sirva de herramienta pal futuro), mi futuro claramente está delante, pero no es lineal.

“Encontrar mi lugar en el mundo”, el lema de la jornada…cuando lo encuentre, le digo. Lo sentiré, se lo aseguro. Mis entrañas se encargarán de eso. Sólo que eso no lo puedo hacer sentada en una silla escuchando a un par de manes que vienen a enseñarme de mi vida. Perdón, pero no lo acepto.

Mi lugar en el Ministerio: pues…yo la verdad estoy usando mi trabajo para coger todo eso que necesito: conocimientos, experiencia, capital social, plata…para poder cambiar una parte del mundo, partecita…chiquitita, pero cambiarla.


Si de soñar se trata, yo sueño: quiero aprender todo lo que sea necesario de formulación y gestión de proyectos, quiero irme de pueblo en pueblo armándolos y moviéndolos; saber muchísimo de eso y para cuando esté "grande", que siente cabeza, crearme una empresa de consultoría; tener una casita en las afueras de la ciudad, donde se pueda respirar aire limpio; poder tener la posibilidad de viajar; quisiera no sentirme atada a las cosas, a las ciudades; quisiera no necesitar más...saber que mis entrañas se sienten libres. Esto es lo que yo sueño, no sé si se hará realidad, no sé si será así que cambie realidades...ni siquiera sé si mañana voy a estar viva.

Yo no pienso que uno viene armado, fijo fijo si viene con un propósito. Y hay es que descubrirlo, no inventarlo! si yo creo que vengo con un propósito, lo busco…y veo opciones, tomo caminos, intento, voy, vengo, caigo, me levanto. Si me invento un propósito, me pierdo de lo que me trae la vida. Yo pienso que uno va armando su rompecabezas…sí, la vida es como un rompecabezas…empiezas armando el marco, y con tiempo y viendo que las figuras cuadran, vas armando el resto, sólo para cuando pase el tiempo, darte cuenta lo lindo que te quedó y lo orgulloso que te sientes. (Aclaración: 1500 pieces puzzle).

2 de noviembre de 2010

Reburujeando en el baúl de los recuerdos

2 de noviembre de 2010
Tratando de encontrar un dato que me llegó en un correo, me puse a buscar entre los elementos enviados (sabía que se lo había remitido a alguien más) a ver si me lo encontraba. Resulta que me encontré más que eso y la verdad me ha dado un vuelco el estómago.

El correo es como ese archivo silencioso que te guarda los secretos, obviamente si no has sido precavido y lo has borrado todo. Encontré unos tesoros del alma que me gustaría extraer:

Conversación con un hombre muy especial al que admiro. Yo le decía:

Quedé con la sensación de no haberlo dicho todo...tal vez porque en ese momento no estaba tan lúcida o clara como para poder expresar todo lo que pensaba (sueño, cansancio, marcación a presión del sujeto al lado...esas cosas pasan, vos entendés). La verdad odio tener que callarme cosas; siempre pienso "qué hubiera pasado si en vez de cerrar el pico, lo hubiera abierto" y siendo sincera, a pesar de lo que pueda pasar, prefiero mil veces la certeza de un desatino que la duda de un acierto; no me gusta quedarme con ese bittersweet de no haber arriesgado lo suficiente, de no haber dicho lo suficiente...y esa es la razón de la presente comunicación. Creo que nunca es tarde para uno decir lo que piensa y siente, y aunque hubiera sido más apropiado a la media noche del jueves, creo que la mañana del lunes, no está tan mal...

Ese día la conversación se tornó bastante trascendental, llegamos hasta Tenerife! Yo la verdad no quería llegar hasta allá, mis pretensiones son por ahora muy básicas. No te voy a decir que quiero pasar el resto de la vida con vos; ni que (como si te dije ese día) quiero un anillo en el dedo - de hecho el solo pensar en eso me da como escalofrío, le temo mucho y muy bien lo sabés; - ni que estoy enamorada de vos ni nada por el estilo...sólo te puedo decir que me encanta tu forma de ser (asi terco, trabajólico, ácido y todo), que disfruto muchísimo el tiempo a tu lado (y también de los picos y los abrazos), que he aprendido más de lo que imaginé, y que por ahora no me interesa dejar de sentir.

(…) así como quedamos la última vez, me comprometo a dar lo que pueda dar. Entre estas cosas he listado algunas, la más importante es que prometo tratar de sacar a relucir mi "facultad de decidir y ordenar mi propia conducta" - la RAE dice que eso es voluntad, aunque para mi es más bien como una lucha de poderes entre la razón y el corazón, donde a veces gana la una y a veces gana el otro - (nótese el resalto en tratar , no mentiras...)...jeje aqui van las siguientes:

Hagamos un trato

Que el entregarte todo lo que pueda dar, sea mi promesa:

- Un aire más puro,
- Un beso suavecito,
- Un hombro y un diván para desahogar el alma, pero un vino para ahogar las penas,
- Un abrazo constante,
- Un pequeño desastre de vez en cuando para sacarte una sonrisa,
- Una oportunidad diaria para conocerme y conocerte,
- Un "estoy pensando en ti" todos los días...así no sea capaz de decírtelo (ya lo sabes)
- Un día más tranquilo (y una noche más intensa...pero creo que mejor omitimos la segunda parte)
y para mí, la más importante: Mi negación a no sentir...porque dejar de sentir, es empezar a morir.

Ya por otro lado, quería contarte que yo también he arriesgado y he perdido, he perdido muchísimo, a pesar de los poquitos años que tengo, me ha tocado agachar cabeza y comer m***a pero tengo claro que para algún día ganar, tengo que arriesgar algo. Comprendo tu temor, pero de eso se trata la vida, de sentir, y no solo sentir amor, alegría, esperanza...también hay que sentir dolor y tristeza, hay que enfrentar situaciones malucas...ahí es donde nos conocemos y donde sentimos al extremo la vida, porque Dios no nos dio corazón sólo para amar y vivir en una constante alegría...todos los sentimientos hay que experimentarlos!!! (Eso pienso yo, si no estás de acuerdo, pos ni modo).

Ya está muy tarde, tengo sueño, mañana tengo pico y placa y hay que madrugar mucho. Te dejo un beso y una flor, un te quiero, una caricia y un adiós. Que Dios te Bendiga, que ores mucho por las pecadoras y que tomes este tiempo para seguir poniendo la casa en orden! Descansa!

Esto pasó en octubre hace dos años. Él me respondió:

Finalmente, ahí va!

Bueno, pues antes que interrumpirme me has sorprendido. Lo dije por reflejo y lo repito con conciencia: hay que ser muy berraco para decir (aún más, escribir) lo que has dicho. El que lo hayas hecho en este espacio, que a mí me da distancia y silencio, es sencillamente oportuno. Valoro pues que asumas el riesgo en aras de certeza (como la certeza es fuente de verdad no me resulta para nada un desatino) y que anheles ambiciosamente ‘decirlo todo’ –tarea que yo, después de intentos fallidos, declaro un imposible-.

Pensé (e intenté) mil (bueno, 4 o 5) cosas antes de escribir y me imaginé un volumen del tamaño de un nuevo Evangelio (bueno, de 3 o 4 páginas), pero tu mensaje es claro y directo, así es mi respuesta.

1. Gracias. Que generosa y valiosa oferta. Una persona que asume sentir lo que siente vale oro.

2. Acepto la parte que implica solidaridad y paz. Solidaridad porque me gusta emprender grandes cosas y necesito compañía. Paz para encarar esas grandes cosas, ojalá por partes, y evitar grandes frustraciones.

3. El dilema de la voluntad lo entiendo distinto. Si el propósito de las cosas está claro, la voluntad es más dócil. Considerando que tenemos una restricción y podemos aprender uno del otro (cuánto me has ayudado a des-aturdir) y ayudar uno al otro, pues vamos a la fija, a lo seguro y a lo inambiguo. Elijo cualquier cosa que signifique SER (con todo lo que implica) o NO SER (también, con todo lo que implica) pero definitivamente me da mamera ‘jalarle’ a ambigüedades.

Vos sos un bello tesoro, no te conformés con menos de un aguerrido conquistador (y buen papá de tus hijos). Tenés, además de mi gusto y admiración, mi compañía, mi solidaridad y mi enorme cariño.

PD1. Como escribiste entre Cervantes y Chespirito (me encanta tu estilo tipo “super-O”), te contesto entre San Ignacio y el Chómpiras. Ya ves, estoy estrenando estilo
Ahora le confieso apreciado lector, que me equivoqué con este hombre. No por él, sigue siendo un ser maravilloso al que no me canso de admirar. Mi equivocación va más por mi lado. Pensé que las “restricciones” a las que nos referimos, se podían sencillamente ignorar y empezar a tener una relación. Y no, las cosas no son tan sencillas. No es algo tan difícil como alinear astros y constelaciones para tener una buena relación con alguien. Pero tampoco es tan fácil como soplar y hacer botellas. Las situaciones son distintas, los tiempos son diferentes, hay que aprender a abrir el ojo para detectar si la persona que nos interesa, está alineada en un momento parecido al de nosotros. No podemos exigir más de lo que podemos dar y cada momento de vida tiene sus propios requerimientos. Tal vez a éste personaje le interesaba un poco más de que yo dejara de fumar a su lado o que le ofreciera un trago después de una jornada dura de trabajo.

Sus palabras siempre serán sabias.