15 de diciembre de 2011

La Soledad

15 de diciembre de 2011


Hace ratico ya estuve en el pueblo y tuve la oportunidad de salir con los amigos de la vieja guardia. Hablando de esas cosas que salen en una noche después de la derrota de Colombia en los cuartos de final de un mundial, llegamos al tema de tener una vida social agitada y salir con cierta regularidad. Un muy buen amigo, a quien admiro y quiero mucho decía algo con lo que estoy plenamente de acuerdo; él decía que necesitaba la soledad.

Otro amigo decía que él no soportaba estar solo, que se enloquecía si pasaba un día consigo mismo (tal vez por eso será que a la novia le dicen “la sombra”)

Yo amo mis raticos, me gusta estar sola. ¿Por qué? Porque uno estando solo es quien es y afortunadamente me gusta como soy. Desgraciadamente los adultos tenemos esa maña de ponernos máscaras, de decir mentiras, de actuar en x o y situaciones de x o y forma según la conveniencia. Uno estando solo no tiene que actuar…para qué? No hay nadie que te esté criticando, no hay nadie que te esté juzgando…es uno en su mundo.

El mío no es tan retorcido, es más bien un mundo demasiado normal. Quién soy cuando estoy sola? Pues yo, despeinada, en sudadera y camiseta, que juega póker en línea, arma rompecabezas, escucha música, baila y piensa. Soy esa que se jode la cabeza y se satura de ser. Claro! Muchas veces me canso de ser yo, odio ser tan torpe, odio ser un desastre, odio de los líos que se me aparecen en la cabeza.

Últimamente la gente me está estorbando más de lo normal, no tolero estar con una sola persona más de 6 horas. Yo soy una persona tímida, introvertida y más bien callada…a veces parezco odiosa…y la verdad poco me importa. Hace poco pasaba más de 48 horas con una persona y ahora lo único que quiero es sentarme a ver televisión, con 2.5 litros de coca cola y un paquete grande de choclitos y no darle a nadie! jaja

Lo malo de pasar tanto tiempo sola es que uno va cogiendo mañas, y ya después lograr una sana convivencia con gente que es tan distinta a uno, es complicado. Aunque sueño con el día que me pueda ir a vivir en un apartamento solita, decorarlo como yo quiera y andar en pelota sin miedo que alguien me vea, por ahora disfrutaré de mi soledad y de la ocasional compañía de mi roommate.